Noruega ha decidido que su sistema de pago funciona lo suficientemente bien sin introducir una moneda digital del banco central por ahora, incluso después de varios años de investigación sobre la idea.
La decisión refleja cuán estable y eficiente ha permanecido la infraestructura existente del país, a pesar de que Noruega es una de las economías con menor uso de efectivo del mundo.
También muestra que la prioridad para el banco central es asegurarse de que los pagos sigan funcionando de manera segura en lugar de apresurarse a lanzar una corona digital antes de que sea necesaria.
Norges Bank anunció el miércoles que una CBDC no es necesaria en esta etapa, tras una amplia evaluación de cómo una versión digital de la corona podría apoyar la seguridad y eficiencia de los pagos.
El uso de efectivo en Noruega ha seguido cayendo a algunos de los niveles más bajos a nivel mundial, lo que había intensificado las discusiones sobre si el país requería una opción digital para mantener la moneda nacional atractiva para consumidores, bancos y comerciantes.
El banco central dijo que el sistema actual ofrece operaciones estables, liquidación rápida, bajos costos económicos y sólidos acuerdos de contingencia.
También señaló que ya hay varios proyectos en marcha para fortalecer aún más estos sistemas de respaldo.
El banco central dejó claro que su decisión no es permanente y que la cuestión podría volver a medida que evolucionen los hábitos de pago.
Norges Bank dijo que quiere estar listo para introducir una corona digital si se vuelve necesario mantener un sistema seguro y eficiente.
El banco continúa distinguiendo entre dos modelos principales de CBDC.
Una CBDC minorista actuaría como un medio de pago ampliamente accesible, similar al efectivo físico o los depósitos bancarios.
Una CBDC mayorista estaría diseñada solo para instituciones financieras y permitiría transacciones interbancarias a través de unidades tokenizadas registradas en un ledger digital basado en tecnología blockchain.
Esta distinción ha dado forma a gran parte del trabajo de Noruega hasta ahora.
Un modelo minorista daría a los usuarios cotidianos acceso directo al dinero del banco central en forma digital, mientras que un modelo mayorista reflejaría los depósitos existentes en el banco central utilizando unidades tokenizadas.
Ambas versiones siguen bajo estudio como parte de la evaluación más amplia de Noruega sobre las necesidades futuras de pago.
La baja dependencia del país del efectivo había añadido previamente urgencia a estas evaluaciones.
Sin embargo, Norges Bank concluyó que mantener el sistema existente fuerte y confiable es la prioridad inmediata, considerando una CBDC solo si surgen riesgos o brechas de pago en el futuro.
Aunque Noruega está haciendo una pausa en una corona digital, está aumentando su enfoque en la tokenización.
El banco dijo que los sistemas basados en tokens pueden mejorar la eficiencia, permitir la innovación y reducir el riesgo de liquidación.
También advirtió que persiste la incertidumbre sobre cuán ampliamente se utilizará la tokenización y qué tipos de riesgos pueden aparecer a medida que crece la tecnología.
Norges Bank planea continuar con experimentos prácticos en colaboración con actores de la industria para comprender cómo funcionan las soluciones tokenizadas en transacciones reales.
Estas pruebas son parte de una estrategia más amplia para prepararse para futuros desarrollos en finanzas digitales, incluso sin comprometerse con una CBDC en esta etapa.
El banco central publicará un informe detallado sobre su investigación de CBDC en el primer trimestre del próximo año.
Esto describirá el trabajo completado hasta ahora, sus próximos pasos y cómo planea monitorear el progreso en otras regiones.
Noruega está observando de cerca los proyectos internacionales, incluido el trabajo del Eurosistema en un posible euro digital y los estándares globales emergentes que pueden respaldar sistemas CBDC compartidos en el futuro.
La publicación "Noruega decide no perseguir la moneda digital por ahora" apareció primero en CoinJournal.