Las importaciones mexicanas de autos chinos no han dejado ningún beneficio a México, afirmó el secretario de Economía, Marcelo Ebrard, al poner un ejemplo de la justificación del alza de aranceles aprobada por el Congreso de la Unión.
“Están trayendo vehículos automotores importados que no hacemos nada aquí. Bueno, ni la caja. ¡Pues no te deja nada! Estás desmontando nuestra industria automotriz establecida en México, que son 1 millón 300,000 empleos que hay que cuidar”, dijo el funcionario en una conferencia de prensa.
Sus declaraciones se produjeron horas después de que el gobierno de China pidió corregir el alza unilateral de aranceles en México a productos desde países con los que no tiene acuerdos comerciales, entre los que se incluye una tarifa de 50% a las importaciones de autos.
Actualmente, Estados Unidos y Canadá cobran aranceles de 100% a las importaciones de autos eléctricos originarios de China; mientras que la Unión Europea aplica una tarifa base de 10% sobre las importaciones de automóviles originarios de todo el mundo, con aranceles “adicionales” variables dependiendo del fabricante, como por ejemplo BYD (alrededor de 17%), Geely (19-20 %) y SAIC (hasta 38 por ciento).
De enero a noviembre de 2025, China se ubicó como el primer exportador de vehículos ligeros a México, con alrededor de 270,00 unidades, una reducción de 2.4% interanual.
La réplica de Ebrard incluyó este comentario también: “Lo que nosotros hemos hecho, lo hacen muchos países del mundo, que es proteger algunos sectores de tu economía. No estamos subiendo un arancel a un país, no es un instrumento geopolítico”.
El Senado de México aprobó el decreto por el que se reforman diversas fracciones arancelarias de la Tarifa de la Ley de los Impuestos Generales de Importación y de Exportación para establecer aranceles a 1,463 productos de originarios de países sin acuerdos comerciales, como China, Corea del Sur, India, Indonesia y Brasil.
Ebrard argumentó que existe una sobreproducción mundial en varios sectores, lo que ha derivado en que empresas exporten productos incluso con descuentos que pueden ir de 50 a 70%, por lo que México está poniendo “el piso parejo” para que las empresas mexicanas tengan una competencia justa y leal.
“Es como poner el piso parejo. Esto no es contra un país. Con China tenemos muy buena relación, vamos a seguir dialogando; pero a ver, China tiene restricciones sanitarias a los productos, se entiende, o en algunos sectores se entiende su política, y no lo veo como una diferencia política”, dijo Ebrard.
A una pregunta expresa, respondió: “No lo veo como un guiño a Estados Unidos, porque probablemente a ellos les interesarían otros temas, sino lo veo como una medida preventiva importante para cuidar la economía y no tratar de salvar al niño cuando ya se ahogó”.
Ebrard expuso que la Cámara de Diputados hizo ajustes a los aranceles originalmente propuestos por la presidenta Claudia Sheinbaum, tras realizar consultas con cámaras empresariales de varios países, entre ellos China, India y Corea del Sur.