Para los empresarios mexicanos, si bien hay preocupaciones en las que todos coinciden como es en el hecho de que la corrupción no se frena y el impacto que ya tiene en los negocios, la ubicación es otro factor, y en el norte con su cercanía con Estados Unidos el T-MEC los mantiene con altos niveles de incertidumbre.
En el reporte de Economías Regionales, que el Banco de México a cargo de Victoria Rodríguez realiza de manera periódica, en el norte además del T-MEC, también el atraso en obras claves rumbo al Mundial en el estado sede que es Nuevo León –gobernado por Samuel García–, es un motivo de preocupación, aunque la inversión hecha en obras de infraestructura han servido para crear empleos en la zona.
En general, los empresarios tienen en la lista temas que no pierden de vista y es que el gasto público, en particular en inversión en obras de infraestructura, que sea mayor que el esperado; que se observen, tanto en el ámbito nacional como en el internacional, condiciones más favorables que promuevan la inversión privada, y que mejoren los niveles de seguridad pública.
Mientras que los directivos entrevistados en las regiones centrales y sur también señalaron como factor un mejor desempeño del turismo por que en los próximos meses se tendrá el Mundial en México.
Para los directivos empresariales, las expectativas para los próximos doce meses en relación con los precios de venta, los costos de insumos y los costos salariales, coincidieron en todas las regiones en que estas variables registren tasas de crecimiento iguales o menores a las observadas en los doce meses previos, pero quizás uno de los datos más interesantes, es que en todas las regiones se anticipa que la actividad económica será favorecida por un mayor dinamismo de la demanda interna, sustentado en una mayor inversión privada y mejores condiciones de financiamiento.
Y es que en particular, se espera que la reducción en las tasas de interés y la mayor disponibilidad de crédito fortalezcan la actividad comercial y el consumo de bienes duraderos, como automóviles y vivienda y ahí, la Asociación de Bancos de México (ABM) que lleva Emilio Romano asegura que trabajan de la mano con el Gobierno Federal y la banca de desarrollo para que el crédito fluya de manera más ágil al sector empresarial, en especial a las pequeñas y medianas empresa, todo indica en sí que el 2026 se ve mejor de lo que se esperaba, ya veremos si se logra.
Pese a todo lo que se ha dicho, es un hecho que la llegada al Consejo Coordinador Empresarial (CCE) de José Medina Mora es vista por sus pares y directivos de las principales empresas mexicanas e internacionales como un intermediario sólido con buen nivel de dialogo, entendimiento de los temas y sobre todo que buscará el beneficio de las empresas para que sigan creciendo.
Sin embargo, eso requiere que precisamente conozca de los temas que están y han sido un dolor de cabeza para todos: los atrasos en permisos, la falta de solución en temas energéticos que de hecho es uno de los principales temas en los que trabajará y el poco conocimiento en algunas dependencias de la importancia de no frenar proyectos claves para el país, que sirven para impulsar el crecimiento de la economía.
Media Mora tiene claro que el año que estará al frente tiene uno de los temas más importantes en donde la voz del sector empresarial será clave y es en la revisión del T-MEC; ahí esperan ser una sola voz con el gobierno para que se logren acuerdos y con ello la incertidumbre que se ha generado pueda disiparse por fin, al ser un factor que también ha frenado la llegada de más inversiones.
Pero también a nivel interno, es un hecho de que el sector empresarial espera que haya en el país mejores condiciones de seguridad y certidumbre, además de otros factores para “destrabar” las inversiones. Mucho trabajo por delante.
El tema de las empresas proveedoras del gobierno han dado de que hablar en todos lados. Algunas de reciente creación, otras sin tener la experiencia en los ramos que fueron contratadas o relacionadas con familias de políticos, lo cierto es que eso no ha cambiado y siguen en el centro de atención.
Un ejemplo, es en la Comisión Federal de Electricidad (CFE) que lleva Emilia Calleja, que tiene en su lista de proveedores a Sharp México que lleva años siendo la proveedora preferida de la dependencia en contratos de fotocopiado e impresión.
En 2023 se llevó 92 millones de pesos en un contrario y ahora, en la licitación CFE-0001-CASAN-0042-2025, todo indica que repetirá la hazaña… aunque de acuerdo a los datos que se conocen ofrece precios más altos que la competencia; en unas horas más sabremos el resultado.
La empresa tiene en su historial el embargo millonario que arrastra por el fiasco del contrato con la Suprema Corte, aunque nadie lo recuerda, eso sí al menos el Órgano Interno de Control ya sancionó a 47 empleados de la CFE en 2017 por manipular licitaciones idénticas. En el Poder Judicial ocurrió lo mismo: en 2024, tres competidores fueron eliminados con argumentos dudosos y Sharp se llevó un contrato de más de 4 mil millones de pesos, por lo que ahora sólo toca esperar los resultados y que al final, el dinero que aportamos todos vía impuestos sea utilizado de forma honesta. Ojalá.
Fue el primer informe de los 100 días, y el presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Hugo Aguilar Ortiz, presumió la productividad de la nueva respecto a la anterior que era “lenta, anquilosada, ensimismada y hasta soberbia” y presentó, como sucedió con su exjefe, los “otros datos”.
El abogado oaxaqueño refirió que entre septiembre y noviembre de 2025, resolvieron dos mil 590 expedientes, de los cuales 663 fueron resueltos por el Pleno, 44 por acuerdo o dictamen de las ponencias y mil 883 por acuerdo de la Presidencia. Y aprovechó para comparar el mismo periodo de 2024, cuando se resolvieron dos mil 774 expedientes de los cuales 75 fueron resueltos por el Pleno, 138 por acuerdo o dictamen y mil 459 por acuerdo de la Presidencia, mil 103 se resolvió en Salas.
Si este Pleno ha incrementado “exponencialmente” sus sesiones y productividad, es porque desaparecieron las Salas y los propios datos presentados por Aguilar Ortiz demuestran que se resolvieron más expedientes entre septiembre y noviembre de 2024, y que incluso sumando los resueltos entre el Pleno y las Salas, casi duplican los resueltos por el nuevo Pleno; los números no mienten, pero a veces son mejor los “otros datos”.
Por lo pronto, la moneda está en el aire.

